La realidad se hace voluble ante las manos de un prestidigitador. Lo que creíamos sólido se vuelve irreal, lo que parecía imposible aparece nítido. En ese instante, vivimos en una ilusión y esa sensación la ha recreado DDB para sugerir la fascinación que puede despertar el nuevo Audi A4, de cuyo lanzamiento mundial se ha encargado la agencia española.

No es un espejismo sino sofisticación. Inspirándose en la célebre cita del autor de ciencia ficción Arthur C. Clarke, “cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia”, la campaña recrea las sensaciones que experimentará un conductor al probar este automóvil.

Situaciones tan extraordinarias como conducir una nave espacial, flotar entre la multitud, ver un amanecer desde el espacio o lanzarse en una montaña rusa, son las que recoge el spot para expresar que sí, que puede ser magia, pero no hay ningún truco sino tecnología punta.

La campaña se ha estrenado el 14 de noviembre. Su pieza principal es un spot de 45” rodado por el realizador Jan Wentz para la productora Markenfilm de Hamburgo (Alemania). Jaume Badia es el director creativo por parte de DDB.