“En España nos cuesta mucho llegar a tiempo para ver los partidos de la Champions. Nos perdemos el himno, llegamos mal, tarde y terminamos viéndolo en casa, solos y en pijama”. Con esta denuncia arranca el spot que resume la última campaña de Heineken para conciliar la vida laboral y el ocio futbolero.

Los partidos de Champions empiezan a las 20.45h y a esa hora muchos seguidores aún están desplazándose a casa o ya no llegan a tiempo de quedar con sus amigos. “Salimos de trabajar dos horas más tarde que el resto de los países europeos”, razona el vídeo de la marca cervecera. “Y además tenemos una ley inquebrantable: nadie se levanta de su silla hasta que no se va el jefe”.

Esta situación ha dado la idea a Heineken para organizar un insólito evento: una fiesta de entrega de premios empresariales a la que invitaron a 130 directivos. El acto se celebraba a la misma hora que los partidos de Champions y sirvió de coartada para que los empleados de esos ejecutivos consiguieran salir temprano… a tiempo para la retransmisión.

La preparación del “complot” y las reacciones de los empresarios al ver en una pantalla gigante a sus subordinados, agradeciendo la oportunidad que se les ha dado de salir antes, aparecen en el spot para Internet lanzado por la marca.

El vídeo se grabó el 15 de marzo (en cuya jornada se disputaron los encuentros Atlético de Madrid-PSV y Manchester City-Dinamo de Kiev). Pero la campaña, creada por Leo Burnett, ha arrancado esta semana, con la revelación de la trampa y la puesta en marcha de una web en la que cualquier trabajador podrá pedir ayuda para que también convenzan a su jefe de que les deje salir antes.

El encargado será el exfutbolista Clarence Seedorf, quien grabará vídeos personalizados apoyando la causa a favor del fútbol. Entre los participantes se sortearán entradas para la fiesta Heineken en Ibiza, con motivo de la final de la Champions.

Además, la campaña incluye acciones en el canal Horeca, PLV y en redes sociales bajo el hashtag #UnJefedeChampions.